R. Walser: Jacob von Gunten


¿Dime qué lees y te diré quién eres? No sé  si los lectores de éste, mi blog, que no son amigos directos o familiares (si es que lo hay, me refiero a lector que no sea alguien próximo a mí), se han hecho una idea de cómo soy a través de mis reseñas. Quizás, como mucho, ya tengan claro el tipo de libro que me gusta. El asunto es que Jacob von Gunten es otro de los libros que aparecen, esta vez en el Purgatorio, en el conocido blog de recomendaciones del que a veces me nutro: La medicina de Tongoy. Y, la verdad, creo ya saber qué es lo que hace a su autor recomendar un libro. 

Robert Walser es uno de esos escritores singulares que me atrevo a decir no conoce nadie y los que lo conocen disfrutan en silencio. Al aproximarte a su figura, y al impacto que tuvo y tiene, te sorprendes por sus problemas mentales, por la caída en el olvido de su obra, por la recuperación tardía, por estar relacionado con Vila-Matas, etc. Aunque lo que más sorprende si tu aproximación empieza por la lectura de este libro, es por el 'aroma' a Kafka en el estilo (siendo coetáneo y quizás desconocidos mútuos) y la rememoración a Las tribulaciones del estudiante Törless de Musil. Y entonces, en mi caso, descubres que puede que sí que sea cierta esa frase con la que he empezado esta reseña, porque al llevar este registro de lecturas descubro ligaduras que se mantienen en el tiempo, interrelaciones entre escritores, coincidencias temáticas.  Acusaba el otro día a Vila-Matas de haber dedicado toda su vida a construirse como figura pública, como autor, como persona. Pero quizás lo que tendría que haber hecho fue darle las gracias, porque con su obra, con sus sugerencias, sus citas, su literatura compartida, ha llenado gran parte de mi vida. 


***

Ampliación textual al final de la reseña de Musil:

Además se me ocurre un tema para reflexionar: el inicio de la nueva novela y el tema de la adolescencia. Como referencia léanse: Stephen el héroe (1905), Las tribulaciones del estudiante Törless (1906),  Jacob von Gunten (1909), El retrato del artista adolescente (1916), Los monederos falsos (1925), Narciso y Goldmundo (1930).

Comentarios

Entradas populares