Ignacio Agustí: Desiderio. La ceniza fue árbol 3.
Leer Mariona
Rebull fue toda una sorpresa. Es una de las novelas importantes que uno no se puede perder. Aunque El
viudo Rius no llega a impactar tanto, y se ha de leer más bien como una
novela histórica, sigue manteniendo un alto nivel de interés. En Desiderio (1957),
el tercer volumen de La ceniza fue árbol, nos cuesta más acabarla. Se
nos hace larga y descubrimos que lo realmente interesante de las dos novelas
anteriores es el magnífico trenzado de la historia de los personajes con la
Historia de España.
En Desiderio, aunque de
vez en cuando ocurre, los acontecimientos históricos no llegan a mezclarse con
las venturas y desventuras del joven heredero Rius. Ciertamente, se nos
describe la sociedad burguesa barcelonesa y la modernidad de principios de siglo
representada por los vehículos, el teléfono, los viajes al extranjero, la noche
festiva, las relaciones frívolas y la presencia de drogas o estupefacientes. Pero los tremendos sucesos que ocurren en Europa, no tienen gran impacto sobre los personajes, ni aparentemente sobre la sociedad.
En ese sentido, el hijo de Mariona
y Joaquín, se nos presenta como un joven que no quiere dejarse atrapar
por la tradición. Quiere escapar del negocio familiar, de los casamientos
interesados, le atrae la bohemia y la vida independiente. Pero, al estilo
galdosiano de las novelas de tesis, se va a encontrar con una “Doña Perfecta”,
dispuesta a todo para que no se le escape como futuro yerno.
Comentarios
Publicar un comentario