Władysław Reymont: Los campesinos

 

Llevo meses leyendo Los campesinos de Władysław Reymont. Cuando le dieron el Premio Nobel en 1924 citaron expresamente esta obra como motivo de la concesión de dicho premio.

Los campesinos (1904-1909) fue editado en cuatro volúmenes. Cada uno de ellos corresponde a una estación del año. Durante las mas de mil páginas del tomo que tengo vas viviendo las aventuras de unas familias campesinas en una Polonia prácticamente feudal. Aunque son propietarios de tierras, todos ellos están bajo el control del “castellano” propietario de los bosques y campos al que tienen que tributar respeto y permiso para explotar sus tierras. Además asistimos al control de las instituciones por el señor y por la administración estatal así como a las tensiones que se producen con los vecinos rusos y alemanes. Todo esto nos sirve para hacernos una idea de lo que era Polonia a finales del XIX.

Por otro lado Reymont nos presenta a varios personajes que conviven durante ese año. Así tenemos ante nosotros un retrato social detallado de aquella sociedad cuyas aventuras le permiten atraer nuestra atención desde el primer momento. Es muy interesante observar cómo nos parece estar viendo una larga serie de hoy en día. Las estaciones son como temporadas. E incluso, al final, con todas las historias abiertas, te deja la misma sensación de espera que tienes cuando se acaba una temporada.

Otra cosa que llama la atención nada más empezar es la asombrosa destreza que Reymont muestra. Sin lugar a dudas es un narrador excepcional. Las descripciones de los paisajes y de los sentimientos de los personajes es magistral.