Tirano Banderas: Valle-Inclán.

 

 

Miguel Ángel Asturias decía cuando alguien mencionaba las semejanzas entre El señor presidente y ésta obra, que él había "escrito" el origen de su novela allá por 1922, un poco antes de la edición de Tirano Banderas en 1926. Creo yo que mejor "defensa" sería decir que si uno quiere hablar de dictadores, forzosamente se ha de coincidir, pues una misma realidad algo ha de tener en común.

 

Por otro lado, esta interesante obra de Inclán, quizás tenga el defecto de la lengua en que está escrita, pues más bien es una ejercicio académico de presentación de lo variopinto que es el castellano. 

 

La diferencia más apreciable con la obra de Asturias es el final.